Inspirada por el presente, inducida por los recuerdos, aquí estoy: Riviera Maya, México.
de emociones, estallan y recopilados en milésimas de segundos aparecen frente a mis ojos internos.
Abarcan, esa mirada, detalles que muchas veces , son olvidados.
México...sitio donde hace millones de años... la historia del mundo hace lazos con el Universo, con otras tierras.
Sentir la inspiración de la Tierra de los Dioses.
Los complazco aquí y ahora.
El Café bebida mágica así también el chocolate.
Países de ensueño, querida América, donde los millones de años , pasaron y dividieron los continentes, dejando en estos paraísos lo más selecto de los Dioses.
Una receta muy exquisita , voy a dejar escrita.
Lógico, que un territorio de Dioses, este acto sublime puede conquistar los corazones de quienes aman el café hasta el punto de acometer contra cualquier prejuicio.
Aquí , en México , la madreperla, el nácar y las perlas...
Dejemos la imaginación realice su lujuria.
Los granos de café recién molido...en un recipiente de cobre, calentar el café..sin agua.
Cuando esparsa el aroma, ir vertiendo el agua hervida, caliente a punto de ebullición, lentamente.
El pocillo , debe estar caliente y dentro...perlas, muchas, demaciadas.
Tantas como sea posible, aunque el café vaya volcando su exquisito líquido.
Caerá sobre otro pocillo de más tamaño.
Jueguen , con la cucharilla, rodeando las perlas, saboreando el café.
Tomen las perlas con la mano, y jueguen el sabor entre perlas , café y labios.
Erótico ?
El café es afrodisíaco y está en tu imaginación y también, en estos lugares de mi cuerpo... yo dejo llevar los sentidos a todo los puntos de mi ser.
Porqué no?
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